Las diez principales regiones rusas en el segmento de cultivo de hortalizas en suelo protegido incluyen las regiones de Lipetsk, Moscú, Volgogrado, Kaluga, Novosibirsk, los territorios de Krasnodar y Stavropol, la República de Chechenia, Karachay-Cherkessia y Bashkortostán. Gracias al apoyo estatal sistemático, la industria de invernaderos del país se ha convertido en un motor de crecimiento del nivel de consumo de hortalizas y el factor más importante de sustitución de importaciones. En 2022, la cosecha bruta de hortalizas de interior en el sector organizado ascendió a 1.64 millones de toneladas. La dinámica de 2023 indica que la industria establecerá un nuevo récord a finales de año.