A pesar del alto nivel de automatización, el problema de la escasez de personal sigue siendo relevante para la industria. Una alta proporción del trabajo manual se dedica al cultivo de hortalizas en suelos protegidos. Las calificaciones, la alfabetización y la atención del personal afectan directamente la calidad de la futura cosecha. No hay suficientes especialistas en el país con la experiencia y el nivel de educación necesarios. Por lo tanto, las empresas dedicadas al negocio de los invernaderos a menudo preparan a su personal por su cuenta: seleccionan, capacitan y mejoran sus habilidades.