El invernadero permite cosechar independientemente de la temporada. Y para crear condiciones óptimas para cada cultivo, es necesario tener en cuenta el clima, la composición del material del que está hecho el invernadero, el área del invernadero. Y en función de los datos obtenidos, elija el tipo de calefacción. En este artículo analizaremos todos los métodos de calentamiento, sus ventajas y desventajas.
Tipos de calefacción de invernadero.
La calefacción solar es la opción más fácil y económica. El calentamiento ocurre naturalmente y el calor se libera gradualmente, este efecto se logra debido al efecto invernadero, este método depende directamente del clima y las condiciones climáticas, por lo que es imposible ajustar la temperatura.
Dicho invernadero, en este caso un invernadero, debe estar hecho de policarbonato, ya que dicho material proporciona un mayor efecto invernadero en comparación con otras sustancias. Una alternativa sería el vidrio que transmite más del 95% del flujo de luz. Las desventajas de este método son la necesidad de crear una estructura arqueada, así como orientar estrictamente el invernadero a lo largo del eje de este a oeste.
La peculiaridad del método biológico es que el biocombustible se coloca debajo de la capa fértil, que calienta la tierra debido a los procesos naturales de descomposición, el calor se libera gradualmente. Debido a esto, se requiere menos fertilización y riego. Como biocombustible, a menudo se usa estiércol de caballo, que puede calentarse hasta 70 grados en 7 días y puede mantener esta temperatura durante varios meses. Si no se necesita un calentamiento muy potente, el estiércol se mezcla con paja. Métodos menos poderosos son el uso de aserrín, corteza de árbol y desperdicios de alimentos.
La calefacción de gas tiene una relativa eficiencia y simplicidad del sistema, y el aire se calienta de manera rápida y uniforme, la posibilidad de crearlo a partir de componentes de fábrica: estos son los principales aspectos positivos. Sin embargo, será necesario, junto con un cálculo preciso, preparar planos y un paquete de permisos. Es imposible implementar el proyecto sin el consentimiento de los organismos estatales registradores, y cada alteración del mismo conlleva nuevos costos. Si su sitio está completamente gasificado, entonces no debería tener problemas con la instalación.
Para calentar el invernadero, utiliza un sistema de calentadores o quemadores de gas, que se distribuyen uniformemente alrededor del perímetro de la habitación calentada. Si el invernadero es pequeño, entonces se pueden usar cilindros de gas como fuente de calor, mientras que para grandes áreas calentadas, será necesario recurrir a una conexión centralizada del invernadero al sistema de gasificación principal. La calefacción a gas tiene una serie de desventajas: en primer lugar, el gas natural es explosivo y tóxico. En segundo lugar, cuando se usa en un invernadero, aparece un exceso de humedad y la concentración de dióxido de carbono aumenta varias veces. Para este tipo de calefacción se requiere ventilación, lo que también requiere un cálculo adicional, y en invierno, el suministro de aire fresco devalúa la energía generada.
La calefacción eléctrica es bastante eficiente y no requiere costos significativos. Según los expertos, la mejor forma de trabajar es utilizando fuentes de calor infrarrojo, que no desperdician energía en calentar el aire, transfiriéndolo directamente al suelo y las plantas. Sin embargo, tal solución tiene una dificultad técnica: es imposible hacer todo correctamente sin la ayuda de instaladores calificados. Pero puede variar la calefacción en diferentes partes de la habitación, creando las condiciones más atractivas para cada grupo de cultivos.
El calentamiento de agua es muy adecuado para invernaderos grandes y le permite emitir calor tanto al suelo como al aire. Esta opción se puede implementar de varias maneras: instalando una caldera separada o conectándose a un sistema doméstico. En otro caso, se hace un circuito separado para apagarlo y drenar el agua. Si se está instalando un sistema separado, entonces la caldera debe instalarse teniendo en cuenta el combustible disponible y rentable.
Los modelos a gas son los más convenientes y económicos, le permiten mantener la temperatura deseada. Los productos de la combustión se eliminan mediante una chimenea coaxial. Los modelos de combustible sólido pueden tener diferentes modificaciones. También es una opción económica, pero prácticamente no hay posibilidad de automatización y se requiere un monitoreo constante. Los modelos eléctricos que mantienen la temperatura durante todo el día tienen indicadores de automatización altos. Son de tamaño compacto, seguros y silenciosos, pero el costo de la electricidad es alto. Además de la propia caldera, también es necesario instalar tuberías y radiadores asociados a ellas. También son importantes los tanques de expansión, las chimeneas y las bombas de circulación. Se recomienda formar un par de circuitos de calefacción, y no uno. Se está construyendo una línea subterránea, que está hecha de tuberías de plástico que sirven para migrar agua con una temperatura de aproximadamente +30 grados. Dichos tubos deben colocarse lo más cerca posible de las raíces.
Una forma bastante simple y económica de mantener la temperatura deseada en un invernadero es la presencia de un "piso cálido", que se utiliza para calentar el suelo. Tal sistema de calentamiento del suelo en un invernadero es bastante económico tanto en la etapa de instalación como en la etapa de operación. Además, tiene la capacidad de regular automáticamente la calefacción y distribuir uniformemente el calor por todo el invernadero.
El diseño es bastante simple. El sistema más popular es la esterilla calefactora impermeable. Para crear un "piso cálido" en el invernadero, se eliminan hasta 40 cm de tierra y se vierte arena previamente tamizada en el fondo del hueco con una capa de 5-10 cm. A continuación, se coloca un calentador (espuma de poliestireno, espuma de polietileno, etc.) en el hueco. Seleccionamos materiales resistentes a la humedad. La siguiente capa se coloca material impermeabilizante. Se vierte arena encima con una capa de 5 cm. Todo se humedece con agua y se apisona. El alambre del "piso cálido" se coloca con una serpiente sobre la arena compactada con un paso de 15 cm. El sistema de calefacción terminado se cubre nuevamente con una capa de arena de 5-10 cm, sobre la cual se coloca una malla de eslabones de cadena. A continuación, el "pastel" se cubre con tierra previamente eliminada.
Otra forma de calefacción bastante popular y económica es con una estufa, o más bien una estufa de barriga, que puede mantener una temperatura de aproximadamente 18-24 ° C durante bastante tiempo.
Como ya se mencionó, este método de calentamiento es económico y simple. El precio del combustible para una estufa de barriga es moderado y su instalación se puede realizar de forma independiente, sin la ayuda de especialistas. Además, después de encender con leña, aserrín, materiales de embalaje o trapos, después de ellos se obtiene un excelente fertilizante para alimentar el suelo: la ceniza. Sin embargo, la principal desventaja de usar la estufa en un invernadero es que el aire no siempre se calienta de manera uniforme: hace demasiado calor cerca de la estufa y las plantas plantadas en esta área morirán por la temperatura incorrecta. No olvide que la estufa de barriga es un diseño peligroso para el fuego y, por lo tanto, requiere el cumplimiento de las normas de seguridad. Además, para el trabajo de calidad de la estufa de barriga, es necesario arrojarle combustible regularmente, en otras palabras, estar en el invernadero todo el tiempo.
¿Cómo elegir el tipo de calefacción?
Independientemente de lo que decida calentar el edificio con madera o electricidad, primero debe calcular la cantidad de calor necesaria para ello. Además, necesita tener datos sobre la temperatura diaria más baja para su área y la velocidad promedio del viento durante ese día. Esta información se puede encontrar en el estándar denominado “Climatología y geofísica de la construcción”. En la red se puede encontrar una calculadora para calcular la cantidad en un invernadero. Vale la pena considerar los detalles del material del que están hechos los invernaderos para una selección de calefacción de alta calidad.
Por ejemplo, calentar invernaderos de película, por ejemplo, requiere más calor que calentar invernaderos hechos de policarbonato, un material que en sí mismo es un buen aislante térmico. Es necesario tener en cuenta las características del sistema. Por ejemplo, algunos de ellos, por su elevado coste, no son aptos para pequeños invernaderos. Otros sistemas requieren instalación y configuración profesional. Esto es especialmente importante cuando se trata de calentar invernaderos industriales, donde se utilizan tecnologías avanzadas, como bombas de calor, calefacción por infrarrojos y otras. Y asegúrese de consultar con expertos en todos los temas. Cualquier error mínimo puede conducir a un resultado triste: una mala cosecha y un lento desarrollo de las plantas.