Se instaló un invernadero en el territorio de un jardín de infancia en Ust-Omchug.
Para la educación ecológica de los jóvenes jardineros, se instaló un invernadero en el territorio de un jardín de infancia en Ust-Omchug. En él, los chicos se dedicarán al cultivo de hortalizas. Una innovación interesante y útil apareció gracias a la iniciativa de la administración del distrito como parte del programa municipal "Desarrollo del sistema de educación preescolar en el distrito de Tenkinsky en 2021-2023", informa Kolyma Plus. Se asignaron 155 mil rublos del presupuesto local para estos fines.
El terreno para un pequeño complejo agrícola fue proporcionado por el Centro Operativo Tenkinsky, representado por el director Dmitry Kolomarenko, y el personal del jardín de infancia lo montó e instaló.
“Gracias a los esfuerzos de todas las partes interesadas, nuestros niños en edad preescolar tienen la oportunidad de plantar plantas junto con los maestros, cuidarlas y cultivarlas”, dice Tatyana Popova, directora del jardín de infancia en el pueblo de Ust-Omchug.
El nuevo invernadero ya está en funcionamiento. Jóvenes agrónomos plantaron calabacines y flores. Ahora es el turno de la remolacha, las hierbas y los rábanos. Lilia Kozlova irá pronto a primera clase y también es una de las primeras en la fila para abordar.
– Ya lo hice en mi invernadero. Mamá y yo plantamos cebollas. Me gusta cultivar esas plantas porque son útiles, – dijo Lilia Kozlova, alumna del jardín de infancia.
La siembra de semillas se lleva a cabo bajo la supervisión de educadores. Ayudan a los niños, dan consejos y muestran la tecnología correcta para plantar semillas. Marina Krivosheina, una maestra experimentada, cree que los niños no necesitan esa experiencia, simplemente la necesitan.
– En nuestras condiciones, muchos padres se dedican a los invernaderos, huertas, y también los niños se unen a este trabajo, aprecian el trabajo de sus mayores, los tratan con respeto, – está segura la maestra de jardín de infancia Marina Krivosheina. – La educación ecológica ayuda de nuevo a enseñar a los niños a cuidar el mundo que les rodea.
Terminó la campaña de siembra en el invernadero del jardín de infantes. Los primeros brotes deberían aparecer a finales de mes. Los muchachos todavía tienen que regar, desherbar, ventilar y, como resultado, una rica cosecha.